Más afilado: BMW M850i G15 con Paquete de Carbono en Naranja Atardecer

Incluso con su aspecto de serie, el nuevo BMW Serie 8 Coupé G15 ofrece numerosas vistas emocionantes, pero con el paquete de carbono las cosas se vuelven aún más nítidas. …

 

Incluso en su aspecto estándar, el nuevo BMW Serie 8 Coupé G15 ofrece numerosas vistas emocionantes, pero con el Paquete de Carbono las cosas se ponen varias muescas más nítidas. Las primeras fotos del paquete de equipamiento opcional para todos los amigos de la construcción ligera y el aspecto deportivo muestran el BMW M850i xDrive en color Sunset Orange Metallic y dejan claro lo dinámico que es el aspecto del BMW Serie 8 con Carbon Package. Tu coche de segunda mano en Crestanevada.

 

Los componentes del paquete de carbono casi suenan como un afilado programa de accesorios tuning de BMW M Performance: además del techo de carbono, que resulta extremadamente llamativo en función del color exterior, los montantes de la toma de aire, las tapas de los retrovisores exteriores, el spoiler trasero y el difusor trasero también están acabados en carbono. Al igual que el techo de serie del coupé, el techo de carbono presenta un distintivo contorno de doble burbuja que sugiere un hueco entre el conductor y el acompañante, como en los coches de carreras clásicos.

 

El BMW Serie 8 con Paquete de Carbono es, por tanto, el primer modelo de AG que incorpora un techo de carbono. El material ligero en el punto más alto del vehículo tiene una larga tradición en BMW y se realizó por primera vez en un vehículo de producción en el BMW M3 CSL E46. Más tarde le siguieron el M6 y el M3 Coupé, y ahora berlinas como el M3 y el M5 también están disponibles con el techo de plástico reforzado con fibra de carbono. Desde hace poco, también se puede encargar un techo de carbono para el BMW M2 F87 y el M2 Competition.

 

El BMW M850i con Paquete de Carbono puede permitirse sin duda su aspecto deportivo: el deportivo de lujo está propulsado por un V8 biturbo de 530 CV y acelera desde parado hasta 100 km/h en sólo 3,7 segundos si es necesario. Con 750 Newton metro de par disponible entre 1.800 y 4.600 rpm, los habituales sprints intermedios del día a día también se completan en cuestión de segundos. El modelo básico BMW 840d tampoco tiene que esconderse: El diésel biturbo de 320 CV acelera el Serie 8 Coupé hasta la velocidad de autopista en 4,9 segundos. Ambos modelos están limitados electrónicamente a una velocidad máxima de 250 km/h de fábrica.