Uno de los vehículos clásicos para familias y representantes, el Opel Insignia. En su última versión, también está disponible con un pequeño motor diésel de 3 cilindros. La cuestión es cómo se comporta en autopista el nuevo Insignia 1.5 diésel con cambio automático de 8 velocidades. Cuando los competidores desechan el pequeño diésel en favor de una mayor cilindrada, Opel, por el contrario, no sólo reduce la cilindrada, sino también un cilindro. Una primera conducción corta por la autopista alemana con la unidad diésel de 122 CV.
¿No se aprecia ninguna ventaja a primera vista?
Si nos fijamos en la ficha técnica, el Opel Insignia 1.5 diésel con cambio automático de 8 velocidades sólo tiene una ligera ventaja en el consumo de combustible sobre el diésel de 2.0 litros mucho más potente con 174 CV. Este último también ofrece casi 100 Nm más de par motor. Dependiendo del equipamiento que elijas, el diésel básico es entre 1.500 y casi 3.000 euros más barato en comparación. La ventaja, por la que probablemente esté disponible este motor, sólo se hace patente con el impuesto de circulación. Los aproximadamente 500 centímetros cúbicos menos de cilindrada del motor tienen un efecto positivo en los costes de funcionamiento al cabo del año. Pero al final, lo que cuenta es cómo se conduce.
3 cilindros y diésel, ¿van juntos?
3 cilindros y diesel, que debe correr muy duro. Una frase hecha, como está escrito en el libro. Sin embargo, los ingenieros han hecho todo lo posible para que no sea así. El talón de Aquiles del propulsor es más bien el cambio automático de 8 velocidades, que a veces funciona con lentitud. El diésel de 3 cilindros funciona con relativa suavidad desde el punto de vista del conductor. Sólo cuando se está al lado del coche se adivina cuántos cilindros están en funcionamiento. Como conductor, sólo experimentará el típico carácter de 3 cilindros en un rango de revoluciones muy manejable, de unas 1.100 a 1.300 revoluciones por minuto. En otras palabras, sólo al arrancar.
El Opel Insignia 1.5 Diesel sorprende positivamente en consumo
Una vez en marcha, el coche rueda por la autopista con el típico carácter diésel más que tricilíndrico. Sólo al adelantar, el par motor de 285 Nm lo hace un poco débil en el pecho. El cambio de marchas manual aporta muchas mejoras. El cambio automático de 8 velocidades es algo retardado desde bajas revoluciones con un comando rápido del pedal. Una reducción manual es la solución rápida y sencilla.
Opel Insignia 1.5 Diesel Grand Sport
Al final, obtiene buenos resultados en términos de consumo de combustible. En este caso, incluso supera con creces la especificación de fábrica. Con un consumo de prueba de 4,5 l/100 km en autopista a velocidades de 120 a 160 km/h, el motor es algo de lo que estar orgulloso. ¿Buscas un coche de ocasión en Madrid? En el concesionario de coches de segunda mano Crestanevada Madrid, encontrarás el coche de tus sueños al mejor precio.